Documental Nacido en Gaza
El documental Nacido en Gaza, dirigido por el argentino Hernán Zin, y producido por él mismo, Nieves Rebolledo y Jon Sistiaga, es un sentido y emotivo documento que ofrece un novedoso punto de vista del conflicto palestino.
Rodada durante la ofensiva israelí que asoló la franja de Gaza en julio y agosto de 2014, hace un seguimiento a varios niños palestinos; cómo son sus vidas, testimonios de sus tragedias, así como las secuelas físicas y psicológicas que sufren a diario. Tres meses después del ataque, vuelven a encontrarse con los protagonistas. Un trabajo original que pone cara, ojos y voz, a una guerra que ha adquirido un estatus para el que no quedan calificativos.
En Nacido en Gaza nos encontramos con diez niños residentes en la franja de Gaza, diez historias de tragedias, traumas y heridas con las que lidiar a una edad para la que no se está preparado –si es que se debe estar preparado para algo semejante en algún momento de la vida. Niños que, a pesar de todo, muestran una madurez sorprendente. Diez sueños rotos por las bombas del ejército israelí.
Los casos son dramáticos; tienen que trabajar para mantener a sus familias, han perdido a sus padres o a familiares en los bombardeos, han sufrido heridas graves, padecen enfermedades que solamente se pueden tratar en Israel y hasta que no termine la guerra no pueden acudir a los hospitales, sufren el boicot del ejército israelí, bien negándoles la posibilidad de salir a faenar con sus barcos, bien destrozando las tierras destinadas a la siembra, o matando el ganado con el que se alimentan.
Algunos de ellos se convierten, de la noche a la mañana, en los responsables máximos de familias numerosas, en los encargados de ingresar el dinero para soportar los gastos principales. Sin tiempo para el dolor, para el tratamiento y la recuperación psicológica –por no mencionar la inocencia infantil perdida-, estos niños se encuentran en situaciones tan difíciles como trágicas.
Destaca en la ejecución del documental un tratamiento técnico poco habitual para largometrajes de este tipo. La fotografía aérea nos da una visión amplia del alcance de la destrucción producida por las bombas; una ciudad en ruinas cuya recuperación está muy lejos de ser una realidad. La cámara lenta resalta los momentos cotidianos que para cualquier ciudadano occidental pasan desapercibidos, mientras que para los palestinos son un pequeño regalo; trabajar, lavarse la cara, jugar, montar en bicicleta, cocinar, reír.
El montaje también juega un importante papel, al hacer un seguimiento de cada uno de los niños, y al volver a ellos tres meses después del ataque. Por último, la producción: llevar a cabo un proyecto de semejante complejidad, por la dificultad del lugar y por el peligro que supone para el equipo de rodaje, es una declaración de intenciones, valentía y riesgo por contar una historia que debe ser contada.
Nacido en Gaza es un documental ambicioso, que muestra una cara de la población de Gaza jamás antes vista, un enfoque distinto. Obligatorio de ver, por su calidad humana, por mostrar cuáles son los efectos de la guerra, por mostrar a las víctimas más indefensas y menos merecedoras de un sufrimiento aterrador. Con una carga emocional abrumadora, trae consigo sentimientos de dolor y tristeza, rabia e impotencia. Y con ello, la eterna pregunta ¿hasta cuándo?
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